Acompañamos a un experto norteamericano que estudia a los últimos huemules de la Zona Central de Chile. Una aventura científica en las faldas de los Nevados de Chillán.
Motivados a ser actores relevantes aportando a la conservación de la naturaleza, decidimos ayudar a proteger el hábitat de un animal reconocido, como una "especie paragua" en este territorio, un ser vivo que al ser protegido, se protegerá por consiguiente también a muchas otras especies. Quién más que el Huemul, el hermoso ciervo de los Andes, hoy al borde de la extinción.
Así fue que conocimos a Tony Povilitis, quien hace más de 40 años sigue de cerca esta aislada población, de menos de 100 huemules que aún viven en el Corredor Biológico Nevados de Chillan. Y de inmediato se interesó por ayudarnos: "Si vamos a hacer algo por los huemules, debemos hacerlo ya".
Es un tipo increíble, la última vez que vino a Chile trajo 4 cámaras trampa, y casi sin darnos cuenta estábamos caminando por las nacientes del Río Ñuble, en una expedición de 10 días junto a voluntarios de ONG Dosel y el Laboratorio de Vida Silvestre, de la Universidad de Concepción.
Tony tiene pinta de abuelo, poco pelo y barba blanca, pero energías no le faltan para caminar por las cordilleras. Es alto, flaco y sabio, se toma las cosas con humor. Tras 3 días de lluvia en el campamento 2, en plena cordillera, nos aconseja no correr riesgos innecesarios, fomentar la creación de Áreas Silvestres Protegidas y planificar un turismo con infraestructura y servicios de calidad.
¿Desde entonces nos hemos seguido capacitando, gracias a Tony, a Life Net Nature y l@s colegas del MMA, GEF, UdeC, CONAF, CODEFF y AUMEN.
Si Chile logra la recuperación del Huemul en la región, será una de las historias más sobresalientes de la conservación, un gran éxito que seguro será́ reconocido a nivel mundial.